Ewan McGregor visitó Argentina de incógnito y almorzó guiso en una casa familiar: “Me da pena irme”

agosto 16, 2022

Estaba filmando un documental, y por error llegó a un hogar donde, sin conocerlo, le sirvieron un plato de olla inolvidable.

Por algún motivo, la Argentina ejerce una poderosa atracción entre muchos actores de culto. Muchos de ellos visitaron el país, pero ninguno quizás lo haya hecho tan a fondo como Ewan McGregor, el escocés que protagonizó filmes de la talla de Trainspotting y Moulin Rouge.

McGregor, que últimamente se puso en la piel de Obi-Wan-Kenobi de la saga Star Wars, en 2020 visitó la Argentina cuando protagonizó el documental The Long Way Up junto a Charlie Boorman.

Su paso por nuestro país fue muy comentado, pero en las últimas horas se viralizó un video de una de las paradas que hizo en la provincia de La Rioja.

Lo llamativo es que junto a su camarada pararon en Chilecito, La Rioja, donde se apearon con sus motos en un establecimiento que suponían era de venta de electrónicos, pero resultó ser una casa de familia.

El británico pidió permiso para cargar las baterías de sus dispositivos móviles, y la familia no sólo accedió al pedido, sino que los invitaron a almorzar un guiso sin saber de quiénes se trataban. Las estrellas quedaron asombradas por la cálida hospitalidad, tan poco habitual en otras latitudes.

“Una de las cosas que siempre recordaré de este país es la gente. La gente aquí es increíble, asombrosa. Amigable, atenta, de puertas abiertas… Nadie nunca nos dijo que no. Es un grandioso lugar en el mundo. Me da pena irme”, afirmó Ewan.

Posteriormente, durante una entrevista de promoción del documental, expresó su reconocimiento para con los argentinos: “Fue un privilegio estar ahí, no puedo elegir un solo lugar favorito; todo el país es tan hermoso, la Patagonia es hermosa, y por supuesto que tengo un hermoso mate con una bombilla en mi casa”.

McGregor no es ajeno a la gastronomía, al menos en el set, ya que en 2011 tuvo que encarnar a un cocinero en Perfect Sense, junto a Eva Green. Pensó que la tarea le iba a resultar sencilla, pero en la formación para el papel le tocó un cocinero que lo hizo trabajar a la extenuación.