Entre los miedos más extraños e irracionales que existen en el mundo, la enofobia merece formar parte de la lista. El miedo o pánico a estar en un lugar donde haya vino es un trastorno poco conocido por la ciencia y de cuyo origen no se sabe demasiado. Además, no tiene nada que ver con la cantidad de vino que hayas tomado en tu vida.
En cambio, esta fobia al vino es patológica, de ahí que quien lo padezca no pueda describir cuándo le empezó, ni de qué manera le afecta, porque no ocurre en todas las circunstancias.
Quienes viven con este trastorno evitan acercarse a las botellas de vino, lo que implica que no pueden estar en presencia de otras personas que tomen o botellas que estén almacenadas cerca. Esto les dificulta las salidas a restaurantes y bares, que es donde más gente se ve tomando vino.
Las reacciones de quienes padecen enofobia pueden ir desde la ansiedad, aceleración cardíaca, transpiración, picor, etc. Hasta ahora, la única manera de tratarlo es con la ayuda de un psicólogo, pero todavía no se sabe muy bien cómo curarlo.
¿Habías oído hablar de este trastorno?
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