Increíble pero real: dos turistas españoles que estaban de vacaciones en Albania fueron perseguidos por el dueño de un restaurant, quien estalló de ira luego que los comensales se retiraran del lugar sin pagar porque el servicio había sido demasiado lento.
En la persecución, el propietariodel local se subió al capot del auto de los turistas para romperles el parabrisas en plena marcha, situación que fue filmada por los españoles y se viralizó en las redes sociales.
Mihal Kokedhima, el dueño del restaurant albanés, persiguió a los comensales con un cuchillo, ofendido por el desprecio exhibido a su servicio, mientras los visitantes se refugiaban en el interior del auto. Luego de arrancar, el cocinero se trepó al auto y estuvo en esa posición durante varios kilómetros, mientras les rompía el parabrisas.
Pero todo terminó de la peor manera para el albanés: después de que el ministro de Turismo nacional recibiera a los turistas como medida de desagravio, el funcionario afirmó que “el salvaje que trató de atacar a nuestros amigos españoles violó el código sagrado de la hospitalidad albanesa y nos humilló a todos”.
Y, para peor, al descubrir que el local no tenía permiso de construcción y que el propietario debía varios meses de impuestos, las autoridades decidieron demoler el restaurant y detener al iracundo albanés.
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