Se llama Rotisería La Vuelta y, si bien es una rotisería, también se puede comer sentado en el local. Se encuentra en el barrio de Caballito y se acaba de hacer famosa por una original campaña para concientizar respecto del cuidado del medio ambiente.
Durante el verano, la rotisería regalará a sus clientes el postre (que consiste en una porción de budín de pan casero con crema), con la condición de que vayan a buscar la comida que pidieron con sus propios recipientes reutilizables, así se reduce el uso de plásticos.
Uno de los grandes problemas que tienen que enfrentar los servicios de delivery es la cantidad de recipientes descartables que se usan para transportar la comida, de ahí que la iniciativa de este local sea muy bienvenida por sus clientes, quienes han apoyado la propuesta yendo a comprar ellos mismos.
Para que el recipiente reutilizable sea apto, tiene que ser del tipo tupper, para transportar y almacenar alimentos, que no estén rotos, ni percudidos, con tapa y limpios. También se aceptan de acero inoxidable, pero que no estén con manchas de óxido.
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