Si te tienta comerte un plato digno de ingresar al listado de los récords Guinness, entonces date una vuelta por el barrio porteño de Floresta para degustar la milanesa de entraña más grande del mundo.
La preparan en Nosso, un bodegón ubicado en la calle Candelaria 290, muy cerca de la Av. Juan Bautista Alberdi y Mariano Acosta. Y, de tanto contarse el dato de boca a oreja, el restaurante no da abasto, por lo que conviene ir temprano para conseguir mesa.
Pero no solo por esta mega milanesa “vale el viaje”, tal como diría la Guía Michelin: también hay otros platos tradicionales de la cocina porteña que se pueden pedir en este lugar y que están muy bien elaborados.
La milanesa de entraña, que solo se puede consumir en el local, cuesta $ 4.200, viene acompañada con papas fritas y es para compartir con tres o más comensales.
Si la mila no te tienta, se pueden pedir chinchulines al limón, la provoleta de la casa, los ñoquis Scarparo, entre los platos salados.
A la hora de los postres, la casa tiene una propuesta irresistible para los más indecisos: una degustación de todos, incluyendo budín de pan, vigilante, brownie con helado, flan y mousse de chocolate.
Qué hacer con cada producto para preservar su sabor y evitar intoxicaciones.
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