Hay un puesto de comida callejera en el sur del Conurbano que no venden los sándwiches tradicionales que suelen consumir los argentinos. Acá no están las clásicas bondiolas o vacío al pan.
Sambucetti Ahumados vende carnes braseadas, cocinadas durante varias horas, y condimentadas. El espacio bien podría estar en la esquina de un pueblo de Texas o al borde de una ruta de Nueva Orleans para alimentar a camioneros que recorren el sur de los Estados Unidos.
El lugar abre de jueves a sábados y aclaran en su cuenta de Instagram que se mantienen abiertos “hasta agotar stock”. Ofrecen desde pulled pork, brisket (tapa de asado) y ribs con barbacoa. Las carnes se pueden combinar con cebolla caramelizada y mayonesa de verdeo.
En los momentos de apertura de Sambucetti, se forman largas colas en la esquina de Rodolfo López y Urquiza, Quilmes Oeste.
“El ahumado es un proceso muy largo de cocción, por lo que cuando me quedo sin el stock de la semana hasta la próxima no abro. El día de ahumado es el miércoles y abro al público los jueves y viernes mediodía y noche, y sábado mediodía. Los días que no abro me dedico a preparar todo lo que corresponde para que cada producto que vengan a probar sea de la mejor calidad“, explica el creador, Luciano Sambucetti.
“Esto no es una parrillita que perdemos el fuego todos los días y a las dos horas ya tengo la comida lista. Y algo no menor es la calidad de la mercadería que uso que me la entregan una vez por semana y no voy a cambiar de proveedores para facturar más, porque lo que me importa es ofrecer lo mejor de algo que todavía la gente está conociendo como algo nuevo“, resalta el creador de los ahumados.
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