“Sumergite en la elegancia de Recoleta y dejá que la Floralis Genérica florezca en tu copa“. La convocatoria es muy tentadora, sobre todo porque llega desde una de las barras más prestigiosas de la ciudad de Buenos Aires, 878.
Porque el bar comandado por Julián Díaz presenta un cóctel inspirado en uno de las esculturas porteñas más icónicas: la Floralis Genérica.
Los 20 metros de altura y sus 18 toneladas desembarcan en versión mini en la barra del speakeasy de Villa Crespo junto con un cóctel preparado con gin Margen Sur, miel de Flores (hibiscus, jacarandá, Santa Rita y manzanilla) y lima.
Los responsables del “8” intentan capturar la esencia de la Recoleta: arte, historia y sofisticación se unen en cada sorbo, un delicado equilibrio de sabores que reflejan la belleza y la precisión de la escultura del arquitecto argentino Eduardo Catalano.
Transformar salsas y ajustar texturas, entre los resultados de este líquido clave.
Recetarios, crónicas, atlas viajeros y manuales ilustrados. Propuestas distintas sobre un universo que nos fanatiza.
No son heladerías, pero elaboran su propio producto con creatividad y estacionalidad.
El cóctel, que se transformó en un clásico de pulperías y luego clubes de barrio,…
Más allá del nombre, nada tiene que ver con el bañado de chocolate que se…
Mauro Colagreco en Tailandia y Pablo Airaudo en el País Vasco mantienen en 2025 las…