Vino en la lata: la tendencia que llega a las góndolas argentinas

Empezó con perfil exportador pero llega finalmente al mercado local.

Como si fuera una gaseosa o una cerveza, la industria vinícola argentina se prepara para, tal vez, su mayor apuesta en 2019: el lanzamiento en el mercado interno del vino en lata. Este formato fue ideado para competir contra el imparable auge de la cerveza, que cada vez más está ganando participación en el mercado a costa del consumo de vino, que se ha venido reduciendo en los últimos tiempos.

La primera bodega en experimentar con esta clase de envase es Familia Zuccardi, que hace rato ya exporta algunos de sus vinos a Estados Unidos en este formato.

Para Sergio Villanueva, gerente de la Unión Vitivinícola Argentina (UVA), “las empresas que están más ligadas a la innovación se dieron cuenta que la lata te elimina la necesidad de llevar cualquier envase grande, hay mayor variedad de marcas y sabores porque el envase te lo permite. Hay un tema central: cuando hay crisis el billetito vale. O sea, no es lo mismo gastarse 200, que 50 o 100. Después hay ofertas de los packs de latas. La lata sobrevivió a la crisis“.

Además, la lata de aluminio no altera el sabor del vino y le da un aire más juvenil para el consumidor millennial que hoy está prefiriendo tomar cerveza.

“El 40% de los hogares argentinos es unipersonal o de dos personas, con lo cual el envase es central. La mitad de los hogares no te va a comprar un envase de 750 centímetros cúbicos para tomarlo en una ocasión especial. La gente que hace estudios nos dice que el consumidor no puso al vino en un sector elitista o de consumo ocasional, las ventajas del vino lo puso ahí”, agrega el especialista.

¿Te animarías a tomar vino en lata?