Una mujer pide pollo frito a un restaurant y le mandan una toalla rebozada

El insólito delivery ocurrió en Filipinas.

Alique Pérez es una filipina que vive en la ciudad de Taguig, en las afueras de Manila, la capital de ese país. Nunca pensó que podría hacerse mundialmente famosa después de pedir por delivery un plato de pollo frito para su hijo.  la sorpresa de su vida al pedir por delivery que le mandaran pollo frito, uno de los platos más consumidos en Filipinas.

La mujer hizo su pedido a una reconocida cadena local, Jollibee, que sería la versión filipina de Kentucky Fried Chicken, porque se especializan en platos a base de pollo frito.

Sin embargo, cuando Alique hincó el diente en su deliciosa presa de pollo, la sorpresa fue mayúscula. En lugar de sentir la textura del pollo, su boca descubrió que no podía trozarlo, y que parecía gomoso al morderlo. Pero peor fue cuando lo retiró de su boca: el color no era blanco, sino turquesa, y se trataba de una toalla que había sido apanada y frita en lugar de la carne de pollo.

“Mientras intentaba darle un bocado, me resultó muy difícil incluso morderlo. Intenté abrirlo con las manos y, para mi sorpresa, era una toalla frita“, escribió en las redes, mostrando todo su fastidio por la estafa.

“¿¡Cómo demonios se mete una toalla en el rebozado y hasta se fríe!? Es tan asqueroso y vergonzoso… Pensar que se acababa de abrir en el barrio de Bonifacio Global City. Hay una primera vez para todo. ¡Y esta ha sido la peor primera vez!”, se quejó. Y agregó: “La esencia de la toalla contaminó el aceite y el rebozado del vendedor, así que, ¿cuántos platos están afectados? No lo sabremos”.

La empresa emitió un comunicado pidiendo disculpas a la clienta y afirmando que habían cerrado el restaurant durante 3 días “para revisar a fondo su cumplimiento de los procedimientos y volver a capacitar al equipo del local”.