Si Evita anunció que volvería y sería millones, a Néstor Kirchner le tocó regresar en formato de carta. Es que su exchofer Rudy Ulloa decidió homenajear al expresidente con un restaurant temático en pleno corazón del barrio porteño de San Telmo, segundo local del que Ulloa ya tiene en Río Gallegos, Santa Cruz.
Se llama NK Ateneo y, aparte de la propuesta gastronómica, posee un pequeño museo con fotos de Néstor de su niñez y su vida política, donde se ven fotos junto a otros líderes como Fidel Castro, Evo Morales, Hugo Chávez, e incluso Raúl Alfonsín.
En una de las mesas se destaca una escultura en tamaño natural de Kirchner, luciendo camisa a cuadros y con los brazos cruzados, desde donde vigila todo el salón y los clientes.
El espacio posee dos plantas y lugar para 76 comensales. Se encuentra en Carlos Calvo 375 y abre de miércoles a domingo, de 10 a 24. Sus mozos lucen frases alegóricas del exmandatario en el dorso de sus camisas, tales como “Quisiera que me recuerden” o “Vengo a proponerles un sueño”.
En la carta hay cortes de carne a la parrilla y, por supuesto, el clásico patagónico del cordero marinado al Malbec y finas hierbas, traído por su propietario desde Santa Cruz. Además, se ofrecen minutas clásicas de cualquier bodegón porteño.
Estrategias integrales o decisiones puntuales. Estos cuatro restaurantes trabajan con conciencia ambiental.
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