Podía suceder. La ansiedad por reabrir después de casi medio año y el poco apego a las normas que suele haber de parte de algunos derivaron en 12 clausuras que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA) debió aplicar el primer sábado desde la reapertura de locales gastronómicos en modalidad veredas.
Dos de las clausuras fueron por fiestas en el interior de los locales, algo que obviamente todavía está prohibido, una fue por vender bebidas alcohólicas en formato take away después de las 20 horas y las restantes nueve fueron por tener mesas y sillas en las veredas fuera del horario permitido, que es hasta la medianoche.
La Agencia Gubernamental de Control de la Ciudad informó que los locales cerrados están ubicados en los barrios de Palermo, Liniers, Agronomía, Constitución y Caballito.
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