El fútbol se ha apoderado de nuestras vidas cotidianas de la mano del triunfo de la Selección Argentina en Qatar y eso no escapa al mundo gastronómico.
Diego Gabriel Jaime dejó el fútbol y se metió de lleno en el mundo de la gastronomía, pero sin olvidar sus orígenes en el deporte.
Nacido y criado en Villa Dorrego, La Matanza, empezó en baby fútbol en la sociedad de fomento del barrio y continuó su carrera de inferiores en San Lorenzo de Almagro, donde llegó hasta la Reserva.
Después, su pasión lo llevó a jugar a otras tierras y anduvo por Ecuador, Puerto Rico y Montenegro, donde el edificio en el que vivía todavía tenía impactos de balas de la guerra.
En 2018 jugaba en Deportivo Laferrere y sufrió cinco desgarros en la misma temporada y quedó libre. Entonces puso un local de hamburguesas llamado Morfi Burger y empezó a nombrar sus platos con nombres de jugadores.
En la actualidad, la cadena tiene 7 locales en marcha, 5 bajo gestión propia y 2 franquicias. Cuenta, además, con un centro de producción y distribución de 400 m2.
El fútbol, por supuesto, es uno de los leit motiv de la oferta gastronómica. Allí se pueden encontrar los combos: Mega Maradó, La Román, La Messi King, La Messi Boom, equipo al que ahora se suma La Scaloneta.
Este prefermente sirve para darle sabor y textura a diversos panificados.
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