Traditional lasagna made with minced beef bolognese sauce and bechamel sauce topped with basil leafs.
Este 29 de julio, como todos los años, se celebra el Día Mundial de la Lasagna.
La palabra lasagna proviene del término griego “lasanon” y del latín “lasanum”, referido al envase o cazuela en el que se cocinaba.
Algunos expertos e historiadores culinarios estiman que uno de los antecedentes históricos de este plato proviene del lasanon, un pastel plano griego. Se cortaban en forma de tiras anchas y largas, rellenas con legumbres y queso, denominándose posteriormente lagum.
En la Antigua Roma, el filósofo y político romano Marco Tulio Cicerón (106 a.C. – 43 a.C.) mencionaba en algunos de sus textos su predilección por el lagum.
Posteriormente, los hechos bélicos y culturales suscitados entre Grecia y el Imperio Romano propiciaron la introducción de este plato en Italia. Y de allí al mundo.
La dupla conformada por la chef Lorena Papasergio y la sommelier Mariana Achával sirve una lasagna que lleva láminas de masa casera, una salsa a base de fileto con carne picada de primera línea y panceta ahumada.
Se completa con una pasta de ricota con hojas de acelga y espinaca salteadas en oliva, y queso parmesano gratinado por encima.
Olleros 3891, Chacarita.
La lasagna no podía faltar en su carta y la ofrecen en varias versiones, pero la favorita lleva capas de vegetales grillados –hongos, zucchini, berenjenas, morrones y zanahorias–, intercalados con capas de mozzarella de búfala.
Se termina con un topping bien grueso de muzzarella fundida y se sirve con una crema de eneldo de elaboración propia.
Carlos Pellegrini 1576, Recoleta.
Aquí es imperdible la lasagna alla bolognese, una de las especialidades del menú, que preparan con una masa artesanal de espinacas, una boloñesa de carne vacuna y de cerdo, y salsa bechamel.
Sale gratinada con parmesano y se sirve dentro de una cacerola de hierro en porción individual de 500 gramos.
García del Río 2802, Saavedra.
En el Ristorante Italiano, cuentan con dos versiones de lasagna, preparadas con crepes caseros.
Por un lado, una de carne que lleva una bolognesa a base de roast beef cocido por 4 horas junto con cebollas y ajos, intercalada con láminas de jamón, capas de muzzarella fundida y una salsa rosa a base de pomodoro y crema.
Por su parte, la versión veggie lleva un mix de berenjenas, zucchinis, morrones y cebollas asadas con aceite de oliva y ajo, que se intercalan con pomodoro y crema.
Posadas 1245, Recoleta.
En la carta figuran cinco opciones de pastas artesanales y una recomendada es su contundente lasagna, hecha con los secretos de la nonna.
Lleva capas de masa casera, hojas de espinaca, ricota, jamón cocido y una bolognesa cocida por seis horas, para la que utilizan carne de primera línea y tomates perita de origen italiano. Llega la mesa gratinada con parmesano.
Esmeralda 924, Microcentro.
En la sección sugerencias del chef del menú, se encuentra la clásica lasagna alla bolognese, elaborada con láminas de pasta a base de harina de sémola y semolín, abundante salsa bolognesa hecha con tomates perita italianos, carne vacuna y carne de cerdo, salsa blanca y abundante queso parmigiano.
Vidal 2228, Belgrano.
Entre las opciones, aquí se destaca la lasagna alla emiliana, típica de Emilia Romagna, con salsa bolognese clásica y salsa bechamel, gratinada con muzzarella y queso parmesano.
Fray Justo Santa María de Oro 2047, Palermo.
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