Solo si tenés el dato vas a encontrar este restaurant, que es el más escondido del mundo. Se llama Frevo y está oculto dentro de una galería de arte en el West Side de Nueva York, donde su puerta de acceso se encuentra detrás de uno de los cuadros expuestos en la galería.
La galería es de verdad y expone la obra del pintor francés Toma-L. Pero el secreto para entrar al restaurant consiste en prestar atención al cuadro más grande de la galería, porque es la puerta de acceso.
Una vez en el interior, te encontrás con un pequeño local de 18 cubiertos sentados frente a una barra, cuyo chef es el brasileño Franco Sampogna, quien prepara un menú de 5 pasos que incluye platos como cangrejo, curry y brócoli de entrada, y pollo, gnocchi y hongos de principal.
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