Dieta de alto rendimiento: te contamos la alimentación de Los Pumas

El rugby es un deporte durísimo para el físico y la alimentación es clave para sostener semejante exigencia.

El reciente desempeño de Los Pumas, nombre por el que se conoce al seleccionado argentino de rugby, lo puso en la tapa de los medios. La primera victoria de la historia sobre los All Blacks y el empate ante Australia en el Tri Nations da la pauta de que el combinado local llegó a un nivel de excelencia inédito.

Son muchos los factores que llevaron a Los Pumas a alcanzar este superlativo nivel, y uno de ellos es la nutrición, aspecto que es decisivo en cualquier deporte, más aún cuando hay un despliegue físico tan intenso como en el rugby.

Cucinare conversó con Lilian Girard, licenciada en Nutrición de gran experiencia en el deporte de alto rendimiento, que contó detalles acerca de la dieta de los rugbiers de primer nivel:

Cucinare: ¿Qué aspecto hay que tener en cuenta en la nutrición de un rugbier de elite?

Lilian Girard: Lo primero que hay que tener en cuenta al encarar el tema de la nutrición de un rugbier de elite es la posición en la que se desempeña. No es lo mismo un forward (hooker, pilar), donde se requiere fuerza y mucha masa muscular, que la de los backs (medio scrum, wing), donde también hay una importante masa muscular, pero donde prima la agilidad y la pericia para evitar tacles. Un forward de elite debe pesar más de 100 kilos, mientras los backs por lo general oscilan entre 85 y 95 kilos. La regla es que hay que hacer las cuatro comidas diarias más una o dos colaciones entre horas, y que necesitan comer de todo, muy variado. Pero hay que atender a los siguientes puntos con especial cuidado. Es importante ingerir gran cantidad de hidratos de carbono, en particular pan integral, arroz y pastas. Son los carbohidratos los que le aportan energía al músculo. Los hidratos de carbono deben combinarse con proteínas de alta calidad, como pescado, pollo, carnes magras, huevos, lácteos y legumbres. Consumir grasas saludables, como aceites (preferentemente de oliva), frutos secos y palta.

E ingerir a diario muchas frutas y verduras, que refuerzan el sistema inmunológico y aportan antioxidantes, en particular los frutos rojos (arándanos, frambuesas y moras). Las frutas brindan vitaminas y minerales, de ahí la importancia de variar la cantidad y calidad. Otro aspecto importante en el rugby de elite son los batidos, smoothies y licuados, a los que se les agregan bananas y frutos rojos. Son importantes complementos que ayudan a lograr una buena dieta. A estos se les puede agregar polvos de proteína, y en general se toman después de las sesiones de gimnasio.

C: ¿Y la hidratación?

LG: La hidratación es clave. Antes de cada entrenamiento hay que tomar un vaso de agua fresca; durante el entrenamiento hay que consumir aproximadamente un litro más, y cuando se finaliza hay que beber entre medio litro a un litro de líquido, esto sin detrimento del agua que hay que tomar entre las comidas.

C: ¿Qué se come antes de un partido?

LG: Se come pasta con alguna porción de pollo, o un bowl de arroz con quínoa y pollo, dos o tres horas antes del partido, para aportar energía. Después del partido es indispensable hidratarse y comer algo que aporte proteína y fruta (yogur, licuado, banana o sándwich de queso y tomate, entre otras cosas), además de barras de cereal, que hay en todos los vestuarios, y frutos secos.

C: ¿Con qué rugbiers de elite trabajaste?

LG: Son varios, pero a título de ejemplo te puedo mencionar Patricio Albacete (foto), de la vieja guardia, y a Guido Petti, de las nuevas generaciones.