Qué afección tiene Alberto Fernández y por qué es importante la dieta
El presidente se indispuso en Bali, cuando estaba a punto de dar un discurso dentro del marco el G20.
Cuando el presidente argentino Alberto Fernández se disponía a dar su discurso inaugural en Bali, Indonesia, dentro del marco de la reunión del G20, el dolor pudo más y debió suspender la actividad.
El primer mandatario tuvo una indisposición a partir de un cuadro que podría ser riesgoso si no se trata: una hemorragia duodenal, producto de una gastritis erosiva. Esta se produce por el deterioro del revestimiento del estómago, una inflamación que puede degenerar en úlceras.
Debido a su afección, Fernández fue internado en un sanatorio de Bali y estuvo cinco horas en observación, acompañado del ministro de salud de Indonesia, su secretario privado y la vocera presidencial Gabriela Cerruti.
Existen varias causas que esa dolencia, que puede ser leve, moderada o grave; entre sus causas se pueden mencionar el estrés, o una mala dieta.
A fin de minimizar los efectos, los gastroenterólogos recomiendan no consumir grasas, ni picante, cafeína o alcohol, ya que estos productos pueden exacerbar la enfermedad.
Además de dieta, la gastritis erosiva se combate con medicación, la cabecera de la cama levemente levantada (en caso de que la afección esté en el esófago), y en ocasiones, con cirugía, aunque esta última opción es para los casos severos.
Evidentemente, la función que cumple Alberto Fernández no ayuda en nada para el tratamiento del cuadro, ya que además de la tensión propia del cargo se le suman innumerables compromisos sociales y políticos donde abundan la comida y la bebida.
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